Casi a diario hablamos de sistemas de carga rápida, y recientemente XPeng lanzó el primer sistema que llega hasta 480 kW como máximo. Y esto ya es una potencia realmente elevada, que reduce los tiempos de recarga de la batería de una forma destacable. Pero es que Ideanomics ha ido mucho más allá, porque han conseguido un cargador de 500 kW que es inalámbrico. Es decir, que no solo es más potente que cualquier otro sistema de carga rápida para coches eléctricos, sino que es que además funciona sin cables.
En realidad, el desarrollo de esta tecnología de carga ultra rápida sin cables está enfocada a los vehículos comerciales, pero es que evidentemente es algo que también pueden aprovechar los turismos de particulares. Esta tecnología se basa en WAVE, un protocolo de carga inalámbrica que han llevado hasta los 500 kW de potencia. Y esto significa que, en un tiempo de solo 12 minutos se puede cargar de forma completa un coche eléctrico con batería de 100 kWh de capacidad de almacenamiento energético. Y las baterías de este ‘tamaño’, como ya sabemos, son de las opciones más grandes que hay disponibles en el mercado y están reservados para coches eléctricos de muy gran autonomía.
Son varias las compañías que están trabajando en diferentes tecnologías de carga inalámbrica para vehículos eléctricos. Y lo cierto es que ya hay muchas que funcionan bien, y de manera estable, sin hacer que la temperatura de la batería se eleve en exceso. Ahora bien, hasta ahora se habían conseguido velocidades mucho más bajas; o más bien, potencias que están muy por debajo de lo que puede ofrecer un sistema de carga con cable.
Y lo importante en esta tecnología está precisamente en esto, que la potencia de carga alcanzada está bastante por encima de lo que ofrece casi cualquier sistema de carga por cable. No solo ofrece la ventaja de ser un sistema de carga inalámbrica, que ya es suficientemente relevante, sino que es que además llega a 500 kW de potencia máxima. Pero es que, como comentábamos anteriormente, el foco en el desarrollo de esta tecnología está puesto en vehículos comerciales ligeros y medianos.
La información sobre este nuevo sistema de carga rápida sin cables viene a raíz de que se han completado las primeras pruebas en funcionamiento de esta tecnología. Es decir, que el desarrollo ya había avanzado, pero ha sido ahora cuando han hecho pruebas reales de funcionamiento del sistema y han encontrado que, efectivamente, es una tecnología que funciona de manera adecuada.
Así que podemos esperar que este tipo de sistemas de carga lleguen en un futuro próximo a aplicaciones prácticas. Es decir, que no tardaremos demasiado tiempo en tener disponibles soluciones accesibles. En menos de 5 años deberían estar disponibles para poder comprar este tipo de instalaciones de carga inalámbrica tanto para profesionales como para particulares. Eso sí, seguro que serán más caras las opciones de carga inalámbrica que los puntos de carga con cable convencional.